TENGO UNA TREGUA
No recuerdo exactamente cuando firmé aquella tregua con las matemáticas. Lo mío con los números era una historia imposible con orden de alejamiento recíproca. No me interesaba nada que tuviera que ver con el estudio de fórmulas, de algoritmos, de primos, de pares e impares, de naturales y enteros, de fracciones, de raíces cuadradas, de cuadrados y de no sé cuántas cosas más. Llegó un momento, que sin ir más lejos, me olvidé de salir por la tangente , bordear los márgenes y provocar mi expulsión.....aquel año firmé una tregua con las matemáticas, en realidad no se gracias a que, fue el único curso, en el que las matemáticas se quedaron en junio y no tuve que recuperar los números perdidos en el mes de septiembre. Después, no se porque,.......me decidí por las letras, ante el temor de que los números volvieran reclamando venganza,...... decididos a recuperar su espacio.......
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