Cuando en un suspiro, sientes todo lo contrario de lo que esperabas, y la sensación de bienestar y de alegría fantaseada, pasa a ser una sensación extraña, sin definir, e incluso desconcertante. A ese suspiro lo llamamos corazonada, ante esta sensación, solo esperas que ese vacío, el cual no tiene fondo, sea erróneo. Lamentablemente casi nunca se equivoca, y entonces el vacío pasa a ser un dolor desgarrador e insufrible, y los sentimientos de traición, engaño, manipulación... y toda una serie de adjetivos, cual de todos ellos mas humillante. Entonces es cuando se despierta en uno, un sentimiento de auténtica cólera, cogido de la mano de Doña Traición y la hija de esta llamada Ira, y descubres que tu corazón no solo es rojo, también es negro. “ HAS CONSEGUIDO DESPERTAR EL LADO OSCURO DE MI CORAZÓN, Y TE ASEGURO QUE ESTABA BIEN DORMIDO” ¿dime... por que? Tu no tienes necesidad de abrir la celda de mi mal. Carlos Renau